Termitas...

¡¡ Termitas ¡¡

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Suele ser el grito que tanto contructor como propietario lanzan ante la aparicion de esta pequeña hormiga blanca en apariencia insignificante. Ambos gritos suelen tener motivaciones muy distintas: el constructor acaba de encontrar el perfecto aliado del modificado de proyecto e incremento de su factura; el propietario acaba de ver frustado su intento de reformar por poco dinero la coqueta casa rural que acaba de adquirir.

. Lejos de teatralizar el descubrimiento y desde el punto de vista técnico debemos tener las siguientes consideraciones:

- Las termitas tienen donsideración de plaga. Existen unas 1.900 especies y viven en colonias que pueden contar con más de 2 millones de individuos. En cada colonia, la reina es la única que pone huevos. La mayoría de estos insectos carece de alas pero durante la época de la reproducción algunas desarrollan estos órganos y abandonan el grupo para formar colonias propias.

- Al contrario que la "carcoma" no es detectable a simple vista. La madera con carcoma presenta pequeñas perforaciones por donde el insecto accede y sale de su comida, mientras que la termita huye de la luz y realiza sus perforaciones a lo largo de la madera, siendo indetectanble a simple vista.

Como puede apreciarse en la fotografia, la destrucción de la madera es total, conviertiendo la viga en un mero amasijo de laminas de "papel". La perdida de capacidad resistente es total y dada la completa ocultacion de la plaga, el colapso del elemento puede devenir instantaneamente.

Las posibilidades de reparacion son nulas: debemos ponernos en contacto con un arquitecto experto en rehabilitacione (deberíamos haberlo echo antes de comprar este tipo de vivienda); la madera debe desmontarse por completo y destinarse a leña (ah, cuanto anticuario aficionado ha comprado y vendido termitas a precio de roble centenario¡¡) y debe declarase la plaga a los tecnicos del municipio para su conociminento y control.

El reportaje fotografico es de Septiembre 2009 y han sido obtenidas del forjado de madera de un inmueble con más de 100 años de antiguedad, situado en Navamorcuende (Toledo).